EL CENTRO SOCIOSANITARIO NUESTRA SEÑORA DEL CARMEN CELEBRA SU CENTENARIO

Los próximos 15 y 16 de julio el Centro Sociosanitario Nuestra Señora del Carmen de Valencia comienza los actos de celebración de su centenario. Los primeros actos que se van a organizar tendrán lugar en torno a la fiesta de la Virgen del Carmen. Empezarán la tarde del 15 de julio con una procesión de la Virgen del Carmen de la Cofradía de Nuestra Señora del Mar por el barrio acompañados de la banda de música dels Poblats Maritims. El 16 celebrarán una solemne Eucaristía en la Capilla del Centro y comida de fraternidad con los residentes, colaboradores, voluntarios y Hermanas. 

Hoy compartimos en esta reseña lo que ha sido la historia de este centro desde sus orígenes hasta la actualidad en la celebración de su centenario.

Orígenes del Centro

El actual Centro Sociosanitario Nuestra Señora del Carmen, en sus orígenes se denominó Asilo de Nuestra Señora del Carmen. Fue fundado por la Excma. Sra. Dña., Eugenia Viñes y Cases que, al quedar viuda y no tener sucesión, dedicó sus recursos a actividades caritativas como la fundación de este asilo. El primero bjetivo fue crear un centro para niñas huérfanas pobres, pero fue una hermana hospitalaria, sor María Delfina, que venía frecuentemente a Valencia a pedir limosna (postular) a beneficio del Asilo de las Corst (Barcelona) la que le sugirió a Dña Eugenia cambiar los planes. Ella, recorriendo la ciudad se había podido dar cuenta de que la principal necesidad era la atención a niñas con problemas óseos derivados de la poliomielitis y esta fue la decisión final.

Dña. Eugenia solicitó un terreno en la playa de la Malvarrosa de unos 450 metros cuadrados. Vencidas las dificultades se colocaba la primera piedra en agosto de 1916 y la inauguración se celebró el 16 de julio de 1919. Al acto asistieron autoridades religiosas y civiles, numeroso público de Valencia; también Dña Eugenia Viñes y las primeras hermanas acompañadas de la Superiora general.

El asilo contó siempre, no solo con las aportaciones de Dña, Eugenia, sino también con la generosidad y el cariño del pueblo de Valencia. Diversos médicos, principalmente especialistas en traumatología, trabajaron voluntariamente en la recuperación de estas niñas consiguiendo un porcentaje notable de curaciones; igualmente se cuidaba la formación para prepararles a integrarse en la sociedad. En pocos años la ocupación del centro era cercana alas 100 plazas.

Principales acontecimientos

Con la proclamación de la República en el mes de abril de 1931 empezaron las inquietudes que continuaron en el estallido de la Guerra Civil de 1936. Las hermanas tuvieron que dejar el Asilo, algunas estuvieron en la cárcel y otras en una sencilla casa de campo, en el pueblo de Meliana, que les proporcionó un matrimonio amigo del Asilo. Pasada la guerra tuvieron que empezar de cero porque el edificio había sufrido muchos deterioros. Como en otras ocasiones recibieron la ayuda de la Congregación, especialmente de la casa de San Baudilio de Llobregat (Barcelona).

El 14 de octubre de 1957 Valencia sufrió una gran riada, siendo el Asilo del Carmen de la Malvarrosa una de las edificaciones que más daño sufrió. La prensase refería a este triste episodio diciendo: “Heroísmo de las monjas del Asilo del Carmen” y hablaba de la valentía de 22 hermanas que rescataron del inminente peligro a las 90 niñas hospitalizadas.

La masa de agua rodeó al Asilo con tal fuerza que los cimientos de la facha se resistieron con peligro de derrumbamiento. Dos hermanas jóvenes se arriesgaron a vadear la calle, con el agua por encima de la cintura, para pedir auxilio al Sanatorio Nacional de la Malvarrosa. Con su ayuda se pusieron a salvo niñas y hermanas.La casa quedó muy dañada, pero Valencia entera acudió en ayuda de las hermanas y las niñas acogidas sintiendo la obra como propia: las autoridades, la radio,comisiones falleras…, todos ofrecieron su colaboración. Tampoco faltó la colaboración de las hermanas de la Congregación.

Hospital de traumatología y médico quirúrgico

Con el paso delos años y las transformaciones de la sociedad española, especialmente en lo que se refiere a la erradicación de la poliomielitis, el asilo fue modificando su actividad, o mejor dicho su razón de ser. En 1966 comenzó a funcionar como centro médico quirúrgico, principalmente en la especialidad de traumatología y rehabilitación, concertado con la Seguridad Social. A pesar de esta transformación el centro siguió acogiendo a casos de beneficencia cuando la necesidad lo requería. No obstante, el año 1974 quedó prácticamente sin niñas que fueron trasladadas a la Residencia Sanitaria La fe y fue también el año que las hermanas dejaron de salir a pedir limosna.

Los adelantos de la medicina exigen incorporar nuevos servicios al Hospital y mejorar las condiciones de equipamiento. Durante cerca de 20 años su director D. Miguel Herraiz consiguió que el Hospital estuviera bien acreditado, ofreciendo un alto nivel de calidad asistencial, casi siempre con escasos recursos. La aportación de las hermanas, la participación de buenos profesionales y las múltiples gestiones con organismos lo hicieron posible. No obstante esta dificultad de “estar día” en la evolución de la medicina, exigió un segundo cambio en el centro.

Centro Sociosanitario Nuestra Señora del Carmen

1986 queda marcado en la historia del centro como el año del cambio. En el mes de mayo el Hospital Nuestra Señora del Carmen cesó la actividad quirúrgica concertada y se iniciaron gestiones con la Conselleria de Trabajo y Seguridad Social que concluyeron con la firma de un convenio para la asistencia en régimen de internado de ancianos válidos y dependientes, dada la carencia que había de este servicio. El acuerdo se firmó el 1 de noviembre de este mismo año, firmado por el Conseller de Trabajo y Seguridad Social, D. Miguel Domenech Pastor y por la Superiora de la casa Sor María Luz López Martín.

Con la firma de este convenio se dio un paso importante, siempre siguiendo los criterios para los que fue fundado el centro: ayudar a las personas más necesitadas como son las de la tercera edad. Unos años más tarde se inaugura un centro diurno de 35 plazas que vienen a completar el servicio residencial del que hoy se denomina Centro Sociosanitario Nuestra Señora del Carmen que cuenta con 115 plazas.

Rehabilitación de personas afectadas por daño cerebral

Por último, a finales de 2.002 se decidió transformar la Unidad deRehabilitación Ambulatoria que continuaba su servicio después del cierre dela actividad hospitalaria. Así se puso en marcha una novedosa y moderna Unidad de Daño Cerebral para la rehabilitación de pacientes con graves afecciones tanto físicas como psicológicas, originadas por traumatismo craneoencefálico, ictus, encefalitis, cáncer, accidente cerebro vascular y otras enfermedades traumáticas. Una unidad en la que se atiende tanto apacientes privados como a pacientes derivados por la Agencia Valenciana de Salud.

Este servicio de Valencia se integra en la Red Menni de Daño Cerebralque integra distintos centros de la Congregación esparcidos por España entrelos que destacan el ubicado en el Hospital Aita Menni de Mondragón (Guipúzcoa) y el del Hospital Beata María Ana de Madrid.

El área Infantil de la Unidad de Daño Cerebral se ha convertido desde2.008 en una referencia para el sector en la ciudad de Valencia. Una situaciónque ha llevado a que a lo largo de 2012 se ponga en marcha un nuevo Centro de Atención Temprana para dar respuesta a uno de los colectivos más sensibles como son los niños de 0 a 6 años.

Un centenario, un buen momento para agradecer

Celebrar un centenario es, principalmente, una ocasión para agradecer. Gracias a Dios que ha guiado, día a día, el camino hospitalario en momentos de gozo y de gran dificultad como fue el de la riada de 1957. A los Fundadores de la Congregación que han sido y son maestro en nuestro ejercicio de la hospitalidad.

A hermanas y colaboradores que, en misión compartida, han hecho posibles esta obra. Destacamos a la fundadora Dña. Eugenia Viñes y sor Maria Delfina por su generosidad y creatividad en el nacimiento del Asilo.

Principalmente quedan en nuestro corazón el rostro de tantas niñas, enfermos y ancianos que nos han sido confiados y han dado y dan sentido a esta obra. Con nuestro Fundador podemos decir: 

Que dicha la nuestra de haber sido favorecidos con tan hermosa vocación de caridad (S. Benito Menni)

Compartir esta página: