La Fundación Purísima Concepción, de Hermanas Hospitalarias, en pro de su permanente búsqueda de nuevas estrategias para mejorar la calidad de vida de las personas con diversidad funcional que atienden a diario, ha puesto en marcha un proyecto de terapia asistida con animales.
Desde hace poco, cuentan con dos galgos: Saeta y Beni, que están ya inmersos en el desarrollo de las terapias, fomentando una mejoría en su estado físico, social, emocional y cognitivo.
Este proyecto se presentó ayer por la mañana por parte del Delegado de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, Higinio Almagro, y se siguió en directo a través de la página del hospital en facebook @hhgranada. «Gracias a este quiosco se da a conocer parte de los servicios y del funcionamiento de este centro que lleva más de medio siglo en Granada, y además hace viable proyectos como la galgoterapia, siendo centro referente en dar este tipo de terapias. Este servicio está ayudando y mucho en el tratamiento a mayores y a personas con discapacidad, es una inversión en la recuperación de personas que lo necesitan», recalcó Almagro.
Y es que los animales proporcionan una fuente de sosiego y un foco de atención. Nos aceptan incondicionalmente, lo que proporciona un entorno “seguro” para que personas vulnerables puedan experimentar nuevas formas de interactuar y relacionarse.
Estos galgos tienen una serie de características que los hacen idóneos para el apoyo terapéutico. Además, su altura permite que personas con movilidad reducida que utilizan sillas de ruedas puedan interactuar con ellos sin mucho esfuerzo físico.
Este tipo de terapia, ha demostrado los siguientes beneficios:
- Ayuda a potenciar la autoestima y la confianza en uno mismo.
- Facilita la expresión y control de emociones.
- Fomenta la participación en grupos, la empatía y las relaciones interpersonales.
- Ayuda a la relajación.