Humanización y valores como activos en el cuidado a las personas
En la mañana del miércoles 15 de marzo, el Centro Hospitalario Padre Menni celebró sus II Jornadas de Buenas Prácticas, que contaron con la asistencia de más más de 350 profesionales del ámbito sanitario. La apertura del encuentro corrió a cargo de la Directora del ICASS, María Felisa Lois; la concejala de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Santander, María Tejerina, y la superiora de la Congregación de las Hermanas Hospitalarias, Carmen Martín.
Tras la apertura tuvo lugar una mesa redonda en la que intervinieron Gabriel Heras, responsable del proyecto HU-CI; José Juan Burgos, del Grupo Vygon, y Raquel López receptora de cuidados en Salud Mental.
Gabriel Heras describió las principales características del proyecto HU-CI, que pretende humanizar los Cuidados Intensivos, y que ya se está implantando en un buen número de hospitales españoles y de otros lugares del mundo, especialmente en centros de Hispanoamérica. El mensaje que trasladó Heras a los presentes es que “humanizar la asistencia sanitaria es responsabilidad de todos. Tenemos que vencer las estructuras físicas y mentales del siglo XXI porque la sanidad del presente se construye entre pacientes, familiares y profesionales”. Para este médico intensivista del Hospital de Torrejón de Ardoz, “es muy importante que entre todos diseñemos y hablemos de lo que sentimos porque el cuidado emocional de las personas es lo que va a cambiar la sanidad y construirla en un sentido más humano”.
José Juan Burgos también expuso un proyecto que se puso en marcha en 2013, el premio Hospital Optimista, creado por la multinacional francesa Vygon, y que tiene como objetivo “reconocer el trabajo de personas, equipos y hospitales que trabajan para generar optimismo y sonrisas”. Burgos se refirió a la motivación, inspiración y contribución a los demás como factores claves para cuidar a las personas.
Finalmente, en la mesa redonda intervino Raquel López, receptora de cuidados en salud mental, quien expuso su punto de vista como paciente para reflexionar sobre qué esperan los pacientes de salud mental de los profesionales que les tratan. Raquel López sintetizó los cinco aspectos que demanda como usuaria de cuidados: igualdad, empatía, respeto, comprensión y cariño. También destacó la importancia de que los familiares tengan toda la información sobre la enfermedad, por lo que, señaló, “es fundamental la capacitación de los familiares sobre la dolencia por parte de los profesionales”.
Tras la mesa redonda se desarrollaron dos conferencias. La primera de ellas a cargo de María Luz Fernández, profesora en la Escuela de Enfermería de la Universidad de Cantabria, quien defendió que “la humanización en el ámbito sanitario es una obligación, es inherente a la profesión. La actitud de cada uno ennoblece aquello que hace y lo convierte en humano”. Esta profesora, con casi 40 años de experiencia en el campo de la enfermería y la docencia, señaló la importancia de formar en valores: “Lo más importante de todo es cómo vamos a cuidar de las personas. Es necesario formar en valores como la esperanza, la amistad, el respeto, la compasión, la honestidad, la sinceridad, tolerancia… actitudes que uno muestra en su proceder cada día”. Para María Luz Fernandez, “cuidar de la salud de las personas requiere de nuestro ejemplo y de todos esos valores”.
La segunda conferencia, que cerró estas II Jornadas de Buenas Prácticas del Centro Hospitalario Padre Menni, fue la impartida por Soledad Gallego, gerente del hospital de INCA (Islas Baleares), quien se refirió al compromiso de los gestores en la humanización de la asistencia. Gallardo señaló que la complejidad en el cuidado del paciente requiere un proceso de reflexión. En este sentido planteó tres ideas ‘fuerza’. La primera se refiere a la singularidad de cada individuo que es la clave de cómo trabajar con las personas que tienes alrededor y que requiere saber qué necesita, qué le pasa y acercarse a su realidad; la segunda tiene que ver con escuchar a los pacientes y los profesionales, porque, señaló, el hospital se construye entre todos; y por último, impregnar todo lo que se hace de los valores que guían a la organización.