El Hospital Sagrat Cor de Hermanas Hospitalarias de Martorell celebró el pasado 17 de noviembre el ‘XVIII Monográfico Teórico-práctico en Salud Mental’, que trató sobre la ansiedad, una enfermedad que ha crecido considerablemente los últimos años debido a la actual forma de vivir, con ritmos desbordantes y una creciente individualidad, que dificulta poder compartir problemas, pedir ayuda y ofrecerla.
Durante la jornada, Sònia Serrano, psicóloga del Centro de Salud Mental de Adultos de Martorell, explicó que la ansiedad se puede manifestar en diferentes grados y presentaciones como, por ejemplo, un trastorno de ansiedad puro o acompañante una enfermedad mental, como puede ser una depresión. Así mismo, alertó de la importancia de no generalizar el concepto de ansiedad y saber diferenciar una ansiedad normal -que aumenta el estado de alerta del organismo y lo prepara para determinadas acciones- de una ansiedad patológica, que se da cuando esta respuesta ansiosa es excesiva, incontrolada, duradera y aparece ante situaciones que no tendrían que provocar.
Afectación a nivel psicológico, físico y conductual
Aun así, cuando la ansiedad es patológica se produce una afectación a la autonomía de la persona y a sus capacidades para llevar a cabo las actividades de la vida cotidiana. Los síntomas de este trastorno son tanto psicológicos (miedo, dificultad de concentración, sensación de dispersión…), como físicos (sudoración, tensión muscular, aceleración de la respiración, insomnio…) y conductuales (evitación de situaciones cotidianas, aislamiento…).
Con objeto de prevenir los estados de ansiedad, los expertos reunidos en el Centro Cultural de Martorell señalaron una serie de pautas como favorecer las relaciones sociales, practicar actividades de ocio, deportivas o disciplinas en las que se trabajen técnicas de relajación. También aseguraron que es esencial que la persona tome conciencia de los recursos propios (ej.: capacidad de resolución de problemas y organización, salud, etc.) y de los recursos externos (contar con la colaboración de amigos, familia, buen ambiente laboral…), para hacer frente a las situaciones conflictivas y evitar, así, la aparición de la angustia.